viernes, 29 de abril de 2016

AJOS COMEN, UNA DE INTRIGA, columna publicada en El Día de Zamora El Periódico de Castilla y León
 29-04-2016

UNA DE INTRIGA
El poder no es un ente abstracto. Es la suma de leyes, mensajes tácticos, sobornos, corruptelas y otras estrategias, de las que se valen unos pocos para meter a la mayoría por la vereda de la sumisión consentida, inconsciente. “El juego de las urnas”. En estos cuatro meses hemos visto que no son los políticos los que tienen el mando. Ellos son los títeres, bien remunerados e imprescindibles, cuya misión es que no se note el fomento de la desigualdad entre los más ricos y la gente trabajadora, si es que tiene la suerte de trabajar.
En realidad, los políticos, sobre todo los de alto standing, actúan como Agentes Secretos para las grandes empresas. Conviene recordar a nuestros presidentes y ministros, del pasado y del presente. Esto lleva a pensar que los Estados son como agencias al servicio del Gran Estado, el del dinero.
Después está el cuarto poder, la prensa, que el otro día prefirió huir de las verdades y manipular y difundir mentiras, y el plasma. Tampoco es de extrañar, Cebrián, el de Prisa, el que despidió a un periodista por dar noticias, es uno de sus adalides, ¿qué podemos esperar?

J.V.G.

jueves, 21 de abril de 2016

AJOS COMEN, COMPIS YOGUIS, columna publicada en El Día de Zamora
22-04-2016


COMPIS YOGUIS
Está visto que lo patriótico es tener, por lo menos, un “compi yogui” entre las amistades más cercanas. El rey emérito, de momento, está sobrado con su hermana, la inseparable Corinna y el programador de sus cacerías de elefantes, todos dueños de diferentes sociedades en paraísos fiscales. También Letizia, la nuera, tiene uno, el compi yogui auténtico. El expresidente del gobierno, Felipe González, no es menos, y tiene en su amiguito del alma un compi yogui; bueno, el señor González, gran vocero de la supremacía del poder financiero y maestro de tantas cosas, entre otras, de las puertas giratorias, también tiene a su mujer dentro de ese selecto club. Y al actual presidente del Gobierno en funciones, el señor Rajoy, se le multiplican los compis yoguis entre sus allegados, el señor Soria y el señor Rato son los últimos en aparecer. No seré yo el que incluya al expresidente Aznar entre sus amigos, pero sí entre los compis yoguis de postín.
Todavía rechinan en mis oídos aquellas sentencias que nos culpaban de la crisis por haber vivido por encima de nuestras posibilidades. Y nosotros sin inmutarnos.

J.V.G.

jueves, 14 de abril de 2016

AJOS COMEN, ANTI-PODEMOS, columna publicada en El Día de Zamora
15-04-2016


ANTI-PODEMOS
Conocida nuestra idiosincrasia como españoles, tan dados a engrandecer la picaresca patria, temo que lo de los “papeles de Panamá” se quede en un: “ingeniosos que son los ricos”. Y, entre cachondeo por aquí, cachondeo por allá, terminemos llamando tontos a los que no tenemos chanchullos en ningún paraíso fiscal. Si vemos la tele y a los desesperantes contertulios de los programas que se suponen serios, queda clara la sentencia de Quevedo: “Poderoso caballero es don Dinero”. Hablando de dinero y contertulios, ahora pregonan (mostrando informes falsos) que la financiación de Podemos es ilegal. Pero nadie lleva la causa a los tribunales, y, cuando lo hicieron, las denuncias fueron archivadas. Mi pregunta es: ¿quién financia a los anti-Podemos? No sé por qué me da que se podría ir cerrando el círculo escarbando en los famosos papeles de Panamá o en otros parecidos. Tampoco sé si habrá nuevas elecciones, me imagino que no, pues, para Pedro Sánchez, pactar con Podemos y los partidos progresistas, será su tabla de salvación (entre los partidos progresistas no incluyo al C's de Macías); si las hubiera, vaya campaña anti-Podemos nos espera.

 J.V.G.

viernes, 8 de abril de 2016

AJOS COMEN, EL CLUB DE LOS PATRIOTAS, colummna publicada en El Día de Zamora
08-04-2016


EL CLUB DE LOS PATRIOTAS
Menos mal que entre filtraciones y hackeos nos vamos enterando del funcionamiento de lo que se ha dado en llamar “ingeniería financiera”, porque si fuera por el Ministerio de Hacienda o por su prócer… También es de agradecer que todavía existan periodistas de verdad. Y, qué curioso, ninguno de los grandes medios –ni en papel ni en plasma– ha sido el que ha revelado la noticia de las sociedades oscuras de Panamá, la gran noticia del siglo. Bien es cierto que desde Europa se avisa de la mala praxis de los medios españoles, pero ese es otro tema.
¿Los papeles de Panamá implican a los antisistema, populistas y gentes de la ETA? No. Los implicados son todos grandes patriotas, pero patriotas de bandera, de crucifijo y santiguadas y de hincarse ante el rey, no para eso del IRPF, que ese es otro cantar.
Hartos de oír que vivíamos por encima de nuestras posibilidades mientras las tijeras del recorte nos machacaban, ahora conocemos a los verdaderos responsables de la austeridad. Pero los podemos aforar, total, por unos cuantos más.
P.D.: Nos salen “compis yoguis” hasta debajo de las piedras.

J.V.G.

viernes, 1 de abril de 2016

AJOS COMEN, EL PRECIO DE LAS PERSONAS, columna publlicada en El Día de Zamora El Periódico de Castilla y León
01-04-2016


EL PRECIO DE LAS PERSONAS
Aquí no vamos a comprar a nadie. Eso sí, si se pudiera, venderíamos a alguno, o lo regalábamos (para no hacer negocios sucios). Y, hasta se podría pagar, si se lo llevan. Se hace una colecta y salimos ganando.
Es un juego para ver que no es lo mismo lo que cuestan las cosas que su valor verdadero. Comprar un rey, un príncipe o un ministro de hacienda, por ejemplo, saldría muy caro, porque cuestan mucho, y valen poco. Pero, sin escarbar en este asunto, se ve claro que entre los humildes, tampoco todos tienen el mismo precio. No cuesta lo mismo un francés, un belga o un español, que un pakistaní, que un yemení o que uno de la Conchinchina. Tampoco los directores de los noticiarios de las televisiones públicas valen mucho, aunque nos salen caros de verdad. Gracias a ellos, después de los terribles, bestiales e inhumanos asesinatos de Bruselas, hemos tenido que “no” ver la espantosa realidad de la matanza en un parque infantil de Lahore, Pakistán. ¿Valdrán menos esas víctimas? ¿Serán tan baratas que no merecen la pena?
Conclusión, el precio no se corresponde con el valor real.

J.V.G.