viernes, 27 de diciembre de 2013

AJOS COMEN, LAS VAGINAS Y EL NIÑO DIOS, columna publicada por El Día de Zamora
27-12-2013


LAS VAGINAS Y EL NIÑO DIOS
Traigo esto a colación por la nueva ley de Gallardón contra el aborto. Ya en 1985, su padre fue un gran opositor a la ley de Felipe González, y él, actual Ministro de Justicia, su más fiel colaborador. No han tenido suficiente con privatizar (vender) todo un país, para ahora hacer asunto de Estado las vaginas de las mujeres. Y es que el lobby de los obispos, aquí, en España, es muy fuerte, y, ante ellos, nuestro ministro, se ha bajado los calzones.
Pero yo les digo, a los gobernantes y a la Conferencia Episcopal: si alguna vagina hay que evidenciar, es la vagina inmaculada de la Madre del Niño Dios, por ser antinatural y causante de este desbarajuste. A mí me da igual que esa vagina fuera virgen, penetrada o asalariada. No discutiré si una madre puede ser virgen, pues es algo evidente, pero con este pormenor, sí me interrogaría sobre la existencia de ese Hijo, que en estos días se celebra su eterno cumpleaños, fecha coincidente, dicho sea de paso, con la de tantos dioses, cuando el día comienza a ganarle terreno a la noche.
La nueva ley de Gallardón, que hostiga y degrada a las mujeres, se ha olvidado de sus camaradas corruptos, de los banqueros corruptos y de los empresarios corruptos, ¡qué curioso!, será un despiste. ¡Gallardón, Gallardón!
Sepamos qué, desde 1985, con esta nueva legislación, 1,7 millones de mujeres habrían vulnerado la ley.
Amigas, luchad, revelaos, sed libres, que solamente vosotras tenéis derecho a decidir qué entra y qué sale de vuestras vaginas. Y esos curatos, que se dediquen a custodiar la ficticia virginidad de una madre. Feliz año y que la injusticia no os acompañe.

J.V.G.
Nuestro Ministro de Justicia
El nuevo Torquemada

viernes, 20 de diciembre de 2013

AJOS COMEN, ¡QUÉ SE SEPA!, columna publicada en El Día de Zamora
20-12-2013


¡QUÉ SE SEPA!
Decía Quevedo: “Donde hay poca justicia es peligroso tener razón”. Ni que decir tiene lo peligroso que ha de ser donde la justicia ha sido abolida para mostrarse tan tramposa y desigual como la que nos toca padecer.
La prueba es que el gobierno ha pedido a los reyes magos un camión de 493.680 € que escupe agua, para dispersar a los manifestantes, a los que no les hacen gracia sus tejemanejes, ya descubiertos y protegidos por nuestra peculiar Justicia.
Deberían rodear el Congreso con concertinas, como las de la verja de Melilla, así, los más randas no podrían entrar en España. Bueno, sí, Blesa (el amiguito de Aznar, y de su yerno Agag, anda por ahí, otra vez los yernos, ¡qué curioso!), los de la trama Gürtel campando por sus fueros, la infanta de vacaciones, etc.; mientras, los jueces que metieron mano a estos asuntos están ahora apartados del circuito judicial.
En definitiva, tenemos una justicia de puertas giratorias hecha para los poderosos, banqueros, los de las eléctricas, chorizos, golfos y bribones.
Pero no solamente aquí cuecen habas, el otro día el eurodiputado Godfrey Bloom, en un encendido discurso en el parlamento europeo, advirtió a sus colegas: “La gente os va a colgar y lo hará con razón”, alegando que estaban gobernando a favor de la banca y en contra del pueblo. El suizo Jean Ziegler, uno de los hombres más importantes de la ONU, dice que vivimos en un orden mundial asesino y caníbal, donde el poder financiero decide quienes van a morir de hambre, por lo que sus autores deben ser juzgados en un nuevo Núremberg. Afirma, además, que España no debería pagar su deuda porque es ilegitima y delictiva. ¡Qué se sepa!

J.V.G.

viernes, 13 de diciembre de 2013

AJOS COMEN, MADIBA, UN EJEMPLO, columna publicada en El Día de Zamora
13-12-13


MADIBA, UN EJEMPLO
Se ha ido Madiba, que es como llamaban los que le querían a Nelson Mandela, un gran hombre, un luchador, un contestatario, un condenado (27 años encarcelado), un presidente, una estrella; y al final, otra vez, un hombre. La pena es que la desigualdad siga azotando a Sudáfrica y que tantos negros sigan muriendo miserablemente como en la época de la segregación del apartheid.
Me indigna escuchar a tantos dirigentes políticos, opresores sin miramiento, auténticos demagogos sin conciencia, hablar ahora de Madiba, de su lucha, y de su legado. ¡Cuánta hipocresía! No son pocos los mandatarios de muchas partes del mundo que estos días lanzan loas, casi mitómanas, a la figura de Mandela. Son los mismos mandatarios que comenten grandes injusticias contra sus propios pueblos, algunos de ellos reconocidos dictadores  y otros haciendo méritos para alcanzar dicho reconocimiento.
¿Qué ha expresado Rajoy y sus vocecitas afines? Mientras ensalzan a Mandela por su oposición al apartheid, aquí subvencionan colegios del Opus que segregan en sus clases a niños y niñas. Mientras alaban el coraje de su lucha, aquí decretan una ley mordaza que metería otra vez en la cárcel a aquel revolucionario que luchó por la libertad, la justicia social y la democracia. ¡Qué vergüenza!
El jefe ha ido a Sudáfrica a despedir al mito. A lo mejor nos viene luciendo una camiseta con el rostro de Madiba, de esas del tipo “Che Guevara” que sin duda se pondrán de moda. Desde Johannesburgo, Rajoy ensalza la capacidad del líder africano por buscar la concordia y la reconciliación. Me preguntó: ¿qué piensa de las víctimas del franquismo que todavía no han podido enterrar a sus muertos? Pero, bastante tiene el hombre con emocionarse en el estadio donde España se hizo campeona.

J.V.G.


jueves, 5 de diciembre de 2013

AJOS COMEN, LA SAGRADA CONSTITUCIÓN, columna publicada en El Día de Zamora
05-12-2013


LA SAGRADA CONSTITUCIÓN
Llamo sagrada a la Constitución como si fuera La Biblia; y es que las dos estás hechas con el mismo papel mojado. Las dos pertenecen a un género de escritura que, si yo fuera crítico literario, denominaría “ficción sucia”, como guiño a otro cliché llamado “realismo sucio”, en el que se incluye a Carver, Wolff, Bukowski o Ford.
Dice el artículo 35 de la Constitución: “Todos los españoles tienen el deber de trabajar y el derecho al trabajo, a la libre elección de profesión u oficio, a la promoción a través del trabajo y a una remuneración suficiente para satisfacer sus necesidades y las de su familia, sin que en ningún caso pueda hacerse discriminación por razón de sexo”.
Artículo 47: “Todos los españoles tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada. Los poderes públicos promoverán las condiciones necesarias y establecerán las normas pertinentes para hacer efectivo este derecho, regulando la utilización del suelo de acuerdo con el interés general para impedir la especulación”.
Artículo 50: “Los poderes públicos garantizarán mediante pensiones adecuadas y periódicamente actualizadas, la suficiencia económica a los ciudadanos de la tercera edad”.
Artículo 27: “Todos tienen el derecho a la educación. Se reconoce la libertad de enseñanza”, o “la enseñanza básica es obligatoria y gratuita”. Y así con la sanidad, con el derecho a manifestarse y con todo lo demás. ¿Es la Constitución “ficción sucia”, sí o no?
Ahora los mandantes se cuestionan su reforma. Yo digo: sí, que se reforme, y se resuma en dos frases: “Los derechos quedan en manos de poderosos, trampistas y abusadores. Los demás, que se jodan”. Así sería realista, aunque fuera “realismo sucio”.

J.V.G.


sábado, 30 de noviembre de 2013

VI Jornada Literaria "La Rayuela" Salamanca


Un placer participar con buenos amigos y buenos escritores en esta mesa literaria sobre "realismo sucio", organizada por Editorial Amarante.

Mesa redonda al completo: Comenzando por la izquierda, Carlos de Tomás, Jorge Urreta, David Benedicte, Víctor Marchán, José Villalba Garrote, Jorge San Román y el poeta Zoilo Gascón. 



Cristina Magrazó de Editorial Amarante, abrió el acto y
presentó a los escritores.
Un momento.
Otro.
El escritor y editor Carlos de Tomán, gran organizador y mejor anfitrión.
Otro momento

Esto fue al principio.
Con mi amigo y gran escritor, Carlos María Cabrerizo.
A punto de empezar.
Zoilo Gascón recitando ante nuestra atenta mirada y mejor escucha.
Disertando.
Bonita foto del poeta Ángel Sánchez Gallego
Finalizando con un poema de Zoilo Gascón