23-05-20014
EL MACHO CABRÍO
Aunque
lo parezca por el título de la columna de hoy, no voy a hablar de Bárcenas. En este caso, el protagonista
es otro macho alfa de la misma majada, cuya inteligencia supera todo lo
conocido y por conocer. Confiesa que no quiere dañar a nadie con su supremacía
de erudito, sabio, pensador y macho ilustrado. No hay hembra que pueda competir
con su privilegiado talento, sus dotes para la oratoria y su carácter
campechano y altruista. Me refiero a ese que estamos viendo los últimos días en
los carteles de las ciudades colgado de las farolas (en el mejor sentido de la
palabra, que nadie interprete mal), pidiendo el voto para él (y eso, nunca
estuvo mejor dicho).
Sí,
el candidato Cañete, que, según el
diccionario de la Real Academia de la Lengua es una variedad de ajo común, rojas
las túnicas de sus bulbos, ha hecho de esta campaña electoral unos Ajos Comen en la que las mujeres se lo
comen, pero no por sabroso o apetecible, que, evidentemente, no lo es. Ha sido
por sus palabras machistas. Pero, viendo cómo iba su estrategia de cara a las
elecciones, esas mismas palabras son las que le han salvado la campaña.
Lo
que más me sorprende, aunque no por esperadas, son las ausencias de peticiones
de rectificación por parte de las mujeres de su partido, eso sí que me parece
penoso. Lo que hay que tragar por conservar esos puestos de vida regalada que
ofrece nuestra política patria.
Esperemos
que por sus palabras soeces, al lobbista
Cañete no lo hagan comisario en
Europa, aunque, si gana el que él apoya, que fue ministro del paraíso fiscal
que es Luxemburgo, todo puede pasar.
Contra
el chusco macho ibérico, también PODEMOS.
J.V.G.
Cañete, el brazo tonto del PP |
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