07-02-2014
CONVENCIÓN O CIRCO
Ya
está visto el rumbo que quiere para sí el PP. “Los españoles se han rescatado
ellos solos de la crisis”, vino a decir su presidente en Valladolid. No, lo que
haremos será pagar la salvación de la saqueada banca española (increíble, los humildes
financiando a los bancos estafadores). Asegura que los menudos pronto veremos
la recuperación, que la marea económica está creciendo. Lo dijo el mismo que
llamó hilillos de plastilina a lo del Prestige, el mismo que ha bajado los
salarios y aumentado el paro y el desempleo en más de 700.000 personas.
El
intrépido Montoro afirmó: “continuaremos
haciendo lo que mejor sabemos, reformas para ayudar a los más necesitados”. Era
el turno del humor en ese fin de semana de circo, y a falta de payasos
disfrazados…
Una
cosa quedó clara, dieron tres mensajes: uno a los que siempre les votarán, otro
a los que engañaron en las anteriores elecciones y un tercero a los que nunca confiarán en ellos.
Para los primeros, el lema era: somos muy guapos y los mejores (aplausos). Para
los segundos, los engañados, otro engaño, el anuncio de la bajada de impuestos
y la próxima reforma fiscal. Y, para el resto, que, aunque no lo parezca, es mayoría:
¡os jodéis!, y para demostrarlo y a modo de reto, colocaron en primera fila al
marido de Cospedal. Eso sí, no se
habló, en el circo, de la ausencia de sus animales, ni del aborto, ni de la
corrupción que salpica a sus artistas, ni de su gobierno confesional y sectario,
rigiendo a favor de los poderosos. Todo eso, a la vez que viajaba por España el
Tren de la Libertad de las mujeres, y, en Valladolid, la policía se empleaba
con saña contra la gente insatisfecha.
J.V.G.
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